Libre del pasado, libre del futuro viviendo el momento presente sin necesidad de controlar nada, solo dejando que la vida fluya que todo vaya a su ritmo.
Ya he aprendido que el ritmo del Universo es lento pero seguro, que todo es poco a poco.
Confío en el Universo y dejo que me lleve de su mano, confío en él, aunque reconozco que no ha sido ni fácil ni rápido, para nada, todo lo contrario, pero si tengo algún don es mi Fe, Fe en Dios, Universo, Naturaleza etc…da igual el nombre, Fe en que hay algo más grande , mucho más grande que nosotros que está ahí y que no estamos solos.
Como ya he comentado antes, el ritmo del Universo es lento, así que he tenido que desarrollar la paciencia, es difícil tener que desarrollar paciencia cuando lo estamos pasando mal, pero es justo en esos momentos cuando «toca» desarrollar la paciencia, tener Fe y confiar, difícil tarea jeje.
También me doy cuenta de que las personas somos como pequeños Universos, cada uno de nosotros tenemos nuestro propio ritmo, ya entendí que de nada sirve forzar a una persona para que evolucione más rápido o intentar forzar una situación, ahora sé que tengo que aceptar que todo tiene su proceso y fluir.
Creemos que controlamos mucho y la verdad es que controlamos más bien poco, cuando la vida dice «ahí voy» prepárate porque nada saldrá como lo has planeado jejeje, cuando toca crecer «toca» y tenemos dos opciones, o aprendes o repites, no hay más.
Tampoco me apetece juzgar o analizar la vida de nadie, ¿quién soy yo para juzgar a alguien?
En fin, que siento que me he liberado de muchas cosas y eso produce en mí un estado de alegría y libertad que no tiene precio.
Libre, libre como el aire puro y fresco que nos envuelve.
María Puertas.